Arisman, director ejecutivodel Centro de Estudios del Sudeste de Asia, hizo esa observación en unaentrevista concedida al corresponsal de la Agencia Vietnamita de Noticias enIndonesia.
No sólo se trata de la colaboraciónentre las agencias antiterroristas como compartir informaciones y experiencias,y coordinar acciones, sino una cooperación integral para garantizar que lospobladores de la región vivan en paz y estabilidad, subrayó.
La situación en la ciudadfilipina de Marawi debe ser considerada como una advertencia en el ámbito de laseguridad regional, dijo el especialista y agregó que el hecho podríadesencadenar incidentes similares en Indonesia, Malasia y otros Estados de lazona.
Las amenazas del terrorismoson iguales para los países de la región, especialmente en Indonesia, Malasia yFilipinas, sobre todo en un contexto donde los terroristas han construido unaamplia red de grupos vinculados con el autodenominado Estado Islámico (EI) yAl- Qaeda.
El “tentáculo” del EI haalcanzado al Sudeste Asiático y se está asentando en la región, comentó Arismany expresó su preocupación por el aumento de extremismo en Indonesia, país con lamayor población musulmana en el mundo.
Luchar contra el terrorismoes una responsabilidad no sólo del gobierno y las fuerzas especializadas, sinotambién de la comunidad, sociedad y cada ciudadano, añadió.
VNA- INTER