Las empresas de confección textil promueven la aplicación tecnológica para aumentar la productividad laboral (Foto: Vietnam+) Hanoi- Al aportar 8,84 mil millones de dólares a la facturación general de Vietnam, las confecciones textiles continúan liderando en el país asiático la lista de artículos de exportación valorados en mil millones de dólares en el primer trimestre del año, para un alza interanual del 22,5 por ciento.
Pese a verse directamente afectada por la pandemia de la COVID-19, la industria de confecciones textiles de Vietnam superó todas las dificultades y continúa logrando altos resultados en las ventas al exterior de enero a marzo, gracias a soluciones flexibles.
Importancia de una adaptación flexible
La industria de confecciones textiles constituye uno de los sectores más intensivos en mano de obra; por lo que cuando los trabajadores contraen el coronavirus, el hecho afecta directamente las actividades productivas y comerciales de las empresas.
De acuerdo con Tran Tuong Anh, subdirector general de la empresa Hoa Tho, a principios de este mes, mil 719 trabajadores de su compañía se infectaron o tuvieron contacto cercano con casos de COVID-19 (F0 y F1, respectivamente), lo cual representa el 15 por ciento del recuento total de empleados.
En consecuencia, la empresa negoció con los clientes para reajustar los tiempos de entrega, reorganizar planes y priorizar mano de obra para los pedidos urgentes.
Como medida interna, los empleados que antes trabajaban de forma indirecta pasaron a la producción in situ, reveló, al agregar que la entidad también estableció zonas separadas de trabajo y comida para que el personal infectado labore cuando el Gobierno y el sector de la salud lo autorice.
Al mismo tiempo, para hacer frente a la escasez de mano de obra debido a las medidas de cuarentena por la COVID-19, la compañía 8-3 Textile implementó flexiblemente el cambio de turnos para apoyar en el aseguramiento de la producción a los departamentos y procesos que registran muchos F0 y F1.
Estabilizar el ritmo de crecimiento
En los últimos dos años, especialmente durante el cuarto brote epidémico, las empresas de prendas de vestir enfrentaron numerosas dificultades con la interrupción de las cadenas de suministro de materias primas, incluso muchos fabricantes tuvieron que suspender temporalmente sus actividades.
Hoang Van Linh, presidente de la junta directiva de la compañía Aligro, precisó que los productos de moda son de temporada y los artículos de invierno se producen desde el comienzo del verano.
Debido a esto, Aligro prioriza los pedidos con suficiente materia prima y establece procesos y regulaciones detallados, por lo cual aún garantiza insumos y empleos para los trabajadores, con ingresos estables, destacó.
Puntualmente, se presta mayor atención a la garantía de bienestar social, lo que ayuda a los empleados a sentirse seguros en sus trabajos y negocios.
Según un representante de la empresa de Hoa Tho, cuando el empleado resulta contagiado con la COVID-19, puede ausentarse del trabajo para recibir tratamiento de acuerdo con el tiempo establecido por el Ministerio de Salud, además de disfrutar de los beneficios por enfermedad prescritos por el seguro social.
Luego de recuperarse, el mismo recibirá 300 mil VND (cerca de 13 dólares) y tendrá turnos de comida de acuerdo a un régimen preferencial durante dos semanas.
A propósito del difícil contexto, la empresa también distribuye kits de pruebas rápidas a los empleados y apoya con 50 mil VND (2,15 dólares) adicionales al día a cada persona que debe permanecer en cuarentena, además de mantener el pago del Seguro Social, enfatizó, al añadir que los casos de F1 siguen trabajando normalmente en una zona aislada.
Vietnam cambió su política de “Cero COVID-19” a la adaptación de manera segura y flexible y el control efectivo de la epidemia para recuperar y desarrollar la economía de acuerdo con la Resolución 128 del Gobierno.
La mayoría de las firmas de la industria de prendas de vestir cuentan con pedidos hasta el tercer trimestre de 2022, e incluso para todo el año, especialmente las empresas del Grupo de Textiles y Confecciones de Vietnam (Vinatex), gracias a la dirección y gestión drásticas, así como a la capacidad de satisfacer la demanda de los clientes.
Los resultados alentadores de exportación del sector en los primeros meses de 2022, a pesar de la complicada evolución de la epidemia en muchos mercados importantes, constituye también una premisa esencial para que la industria alcance la meta de exportación de 43 mil millones de dólares como el objetivo establecido a principios de año, y aumente su participación de mercado en el ámbito internacional./.
